La estructura perimetral se refuerza de manera que permite por una parte modificar la distribución para tener estancias de mayor tamaño, y por otro lado reinterpretar y redimensionar los huecos, dejando que en las contraventanas interiores de madera, que realizan el control solar y de la privacidad, se redibujen los huecos de la pieza original.

El programa se distribuye a través de la planta intermedia, donde se encuentra la habitación principal, en la que la escalera lineal se adosa a la medianera dejando libre el testero desde donde se iluminan las habitaciones del nivel superior. Mientras, para bajar a la planta noble, la escalera se adosa al lado opuesto para poder inscribir dentro del trapecio de la parcela el mayor rectángulo posible, de ochenta y dos metros cuadrados, en el que se dispone la zona de día en continuidad con el jardín.

Proyecto del estudio Arquitectos Valencia Fran Silvestre.